Según detallaron, las intervenciones se realizaron en los controles de acceso al predio. A una joven 38 años se le requisó la cartera y encontraron una bolsa tipo ziploc con una pastilla, presuntamente LSD y heroína, con un peso de 0,5 gramos.
Poco más tarde, un adolescente fue sorprendido con un envoltorio de nylon que contenía sustancia granulada blanca, presuntamente metanfetamina, con un peso de 1 gramo. Y posteriormente, a una joven se le encontró entre sus pertenencias una pequeña cantidad de marihuana.
Todas las sustancias fueron sometidas a reactivos narco test, confirmando la presencia de drogas y permitiendo el secuestro inmediato de los elementos.
El resultado del operativo pone en evidencia la peligrosa realidad: pese a los riesgos y sanciones, muchos jóvenes intentan ingresar a fiestas electrónicas con drogas sintéticas, exponiéndose no solo a la ley, sino también a graves peligros para su vida y bienestar.