En abril de 1976, Pablo desapareció junto a sus padres, los chilenos Frida Laschan Mellado y Ángel Athanasiu Jara, cuando tenía solo cinco meses de vida. Había recuperado su identidad en agosto de 2013.
La Secretaría de Derechos Humanos adhiere a las palabras de Abuelas de Plaza de Mayo, quienes en un comunicado expresaron: "El terrorismo de Estado dejó duras huellas en nuestras familias. Día a día, las Abuelas luchamos amorosamente por reconstruir los lazos rotos. Así como celebramos la restitución de cada nieto como si fuera la del propio, cada partida temprana nos duele intensamente".
Pablo falleció el sábado pasado, 11 de abril.
El Gobierno de Río Negro acompaña en el dolor a los familiares, amigos y conocidos.